JORNADA NACIONAL DE LUCHA ESTUDIANTIL
El martes 5 de mayo fue una
jornada de contundente movilización estudiantil. Junto con sectores como el
magisterio y padres de familia, los universitarios de San Simón salieron a las
calles masivamente en una jornada nacional en la que también universitarios en
diferentes latitudes del país hicieron sentir que la razón esta con la lucha
estudiantil.
La movilización salió al
promediar las 10 de la mañana y a los pocos minutos arribó hasta puertas del
rectorado, donde esperaba un contingente policial pertrechado para impedir el
paso a los estudiantes. La presencia policial exasperó a los manifestantes
quienes reclamaron su presencia en esas circunstancias cuando la semana pasada
permitieron el ataque de pandillas a la vigilia estudiantil en el campus
central, sin que uniformado alguno haya prestado “seguridad” a los estudiantes.
Los efectivos policiales
dispararon granadas de gas contra los estudiantes, con el pretexto de los
petardos y una palmera quemada, pero la marcha estudiantil continuó rumbo a la
Plaza principal donde denunciaron los estudiantes que los protectores del Rector
y sus roscas son el gobierno del MAS y las fuerzas represivas de las que
disponen.
Los efectivos policiales dispararon granadas de gas contra los estudiantes, con el pretexto de los petardos y una palmera quemada, pero la marcha estudiantil continuó rumbo a la Plaza principal donde denunciaron los estudiantes que los protectores del Rector y sus roscas son el gobierno del MAS y las fuerzas represivas de las que disponen.
La movilización estudiantil, ahora nacional, continúa hoy miércoles 6 de mayo con la reinstalación del Congreso Estudiantil en horas de la tarde y una marcha de teas al anochecer. La Conferencia Nacional de Universidades que se reúne en Trinidad Beni, a partir del día de hoy donde tratarán el problema de San Simón.
Dirigentes y estudiantes de San Simón señalaron que no cesarán en las movilizaciones hasta ver anulada la resolución que titulariza a docentes sin examen de competencia, hasta lograr la liberación del dirigente Jarlin Coca y expulsar a Waldo Jiménez de su cargo de rector.
